Santísima Trinidad

Gloria al Padre, gloria al Hijo y gloria al Espíritu Santo, como era en un principio, ahora y siempre, por los siglos de los siglos. Amén.

Sagrada Familia

Jesús, José y María os doy el corazón y el alma mía.

Sagrado Corazón De Jesús

Sagrado Corazón De Jesús, en vos confío.

Inmaculado Corazón De María

Inmaculado Corazón de María, sed la salvación del alma mía.

Espíritu Santo

Espíritu Santo, ilumíname y santifícame.

lunes, 2 de octubre de 2023

Novena A Santa Eulalia De Barcelona

Novena A Santa Eulalia De Barcelona 

Santa Eulalia De Barcelona


Día Primero 


En el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo. Amén. 

Fe 


“La fe es la garantía de lo que se espera; la prueba de las realidades que no se ven.” (Hebreos 11, 1) 

La Iglesia nos enseña que la fe es necesaria para la salvación. Santa Eulalia profesó su fe al verdadero Dios, desde los primeros años de vida, en Barcina, actualmente Barcelona (España). Se encerraba en la casa paterna con un grupo de amigas que se reunían para pasar buena parte del día en el servicio del Señor, rezando oraciones que alternaban con el canto de los himnos. El testimonio de vida de esta joven demuestra que la fe es un acto libre de adhesión del hombre a Dios; por eso cuando se presenta frente al juez Daciano, ella dice: “Yo soy Eulalia, sierva de mi Señor Jesucristo que es el rey de los reyes y el Señor que domina: por eso tengo en Él toda mi confianza”. 

Oración 


Santa Eulalia, pedimos tu protección para tantos jóvenes y personas que en estos tiempos se enfrentan a persecuciones a causa de la fe, que están en riesgo de perderla, por caer en la tentación que el mundo propone; acuérdate de los enfermos, los que están privados de la libertad, y que en su condición temporal están a punto de perder la fe o cuestionan la existencia De Dios; que el Espíritu Santo fortalezca y aumente la Fe en todos. Amén. 

Santa Eulalia, virgen y mártir, ruega por nosotros. 

Oración Final (Para todos los días) 


Señor Jesús, que has suscitado en tu iglesia, para ejemplo y admiración de todos tus hijos a la Bienaventurada Virgen y Mártir Santa Eulalia, como modelo de constancia en la fe, en la pureza y en generosidad hasta el testimonio del martirio, para que con su ejemplo, aprendamos a luchar constantemente en nuestras vidas. Te suplicamos, Señor, que por su intercesión Gloriosa, merezcamos la gracia para vencer en el esfuerzo de cada día, y poder así cantar las alabanzas eternamente en el cielo. Te lo pedimos a Ti, que con el Espíritu Santo vives y reinas por los siglos de los siglos. Amén. 

Día Segundo 


En el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo. Amén. 

Amor 


“Pues yo les digo: Amen a sus enemigos y rueguen por los que los persiguen”. (Mateo 5, 44) 

El martirio es considerado por la Iglesia como un supremo don y la prueba mayor de amor y ese don se da a pocos, conviene que todos vivan preparados para confesar a Cristo delante de los hombres y a seguirle por el camino De la Cruz en medio de las persecuciones que nunca faltan a la Iglesia. Eulalia, por amor a Cristo, sufrió crueles torturas, pero fue fiel al Amor, en medio de los tormentos oraba por los que tenían la misión de torturarla, cumpliendo así el mandato de Amar a sus enemigos y a quienes los persiguen. 

Oración 


Oh, Santa Eulalia, tú que creciste en tu corta edad en el Amor de Dios, uno y Trino, dando verdadero testimonio del Amor en el cruel martirio, te pedimos que nos ayudes a Amar al prójimo que nos trata mal, aceptarlo tal como es, destierra de nosotros el rencor, la venganza, la falta de perdón, el resentimiento, el odio, todos esos sentimientos que no son virtudes cristianas, y llévanos a la fuente del Amor, al sacramento de la Confesión y de la Eucaristía, para ser verdaderos testigos de Cristo en medio del mundo. Amén. 

Santa Eulalia, virgen y mártir, ruega por nosotros. 

Terminar con la Oración Final. 

Día Tercero 


En el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo. Amén. 

Valentía 


“Tengan valor y firme el corazón, ustedes, los que esperan en el Señor”. (Salmo 31, 25) 

La valentía en Santa Eulalia es una virtud que caracteriza al cristiano, surge desde las mismas palabras de Cristo, que nos invita a no tener miedo, a confiar, a lanzarnos a difundir su mensaje desde las terrazas. El mundo, ciertamente, ha odiado y odia a quienes forman parte de la Iglesia católica, a quienes siguen al maestro, a quienes acogen su Evangelio de justicia, de paz, y de misericordia. 

Oración 


Señor Dios, Tú que diste la fuerza e inspiración a Santa Eulalia de proclamar tu amor con tal valentía, que muchos se asombraron de verla en pie a pesar de los tormentos, te pido que llenes mi corazón de ese fuego del Espíritu Santo, y sin temor, pueda predicar tus bondades, a todo aquel que te rechace, evangelizar con valentía en nuestros hogares, lugares de trabajo, en la sociedad, así como lo hizo tu digna hijita Santa Eulalia. Todo esto lo pido en el nombre de nuestro Señor Jesucristo. Amén. 

Santa Eulalia, virgen y mártir, ruega por nosotros. 

Terminar con la Oración Final. 

Día Cuarto 


En el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo. Amén. 

Juventud 


“Pues tú eres mi esperanza, Señor, mi confianza desde mi juventud”. (Salmo 71, 5) 

Eulalia desde temprana edad oraba y alababan en espíritu y verdad a Dios, como un verdadero adorador, cuando ella se presenta ante el juez que estaba sediento de sangre cristiana. Llama la atención la Juventud de esta niña con trece años, proveniente de noble familia, que habla De Dios llena de convicción. El nombre de Eulalia significa “aquella que habla bien”, en su tierna edad conoció a Dios y lo transmitió con sabias palabras, además fue vivo ejemplo de servicio y obediencia a sus padres, obediencia que tiene por regla mayor los mandamientos de la ley De Dios. 

Oración 


Padre Santo, enséñale a todos los jóvenes del mundo la verdad que libera, que rompe las cadenas de la injusticia, del pecado, de las esclavitudes, la verdad que forja santos, porque ellos son la esperanza del mundo, para que desde temprana edad siempre cumplan los mandamientos de la ley de Dios. También te pedimos que a nosotros nos ayudes a recordar que la juventud no es solamente una edad cronológica, es un estado del alma, y que podamos dar testimonio de nuestro corazón joven que late entero por amor, como el de Santa Eulalia. Te lo pedimos por Jesucristo nuestro Señor. Amén. 

Santa Eulalia, virgen y mártir, ruega por nosotros. 

Terminar con la Oración Final. 

Día Quinto 


En el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo. Amén. 

Virgen 


“Tomará por esposa a una mujer virgen”. (Levítico 21, 13) 

Para los primeros siglos del cristianismo no era extraño que una joven pudiera escoger permanecer virgen, como es el caso de la niña Eulalia, pero una opción así en el mundo antiguo era algo extraño (al igual que hoy), atendido que el libertinaje sexual era algo normal (como hoy), los gustos disolutos formaban parte de lo ordinario de la existencia de muchos (como hoy). Dios que tanto ama a vírgenes que nacen de la profunda vida de piedad, protegió la pureza de Santa Eulalia hasta después de muerta haciendo crecer el cabello y con misteriosa nevada cubrió el cuerpo desnudo, que durante tres días permaneció colgado de una cruz. 

Oración 


Señor y Dios nuestro, ayúdanos a mantenernos firmes ante este sistema tan contaminado, donde por causa de la modernidad están en desuso los principios y valores cristianos. Apártanos de las tentaciones, situaciones de pecados, de los lobos disfrazados de ovejas, de los pecados contra la castidad, ya que tú nos llamas a la santidad según nuestro estado de vida, y de esta forma nos esforcemos por vivir unidos solamente a ti. Por Jesucristo, nuestro Señor. Amén. 

Santa Eulalia, virgen y mártir, ruega por nosotros. 

Terminar con la Oración Final. 

Día Sexto 


En el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo. Amén. 

Santidad 


“Santifíquense y sean santos; porque yo soy El Señor, su Dios”. (Levítico 20, 7) 

Todos los cristianos, de cualquier estado o condición, estamos llamados cada uno por su propio camino, a la perfección de la santidad. Santa Eulalia desde niña vivió en santidad, cumpliendo los mandamientos de la ley de Dios, vivió una vida dedicada a la caridad, la santidad no la improvisó. La santidad la alcanzó como un camino de subida hacia la altura y con esfuerzo y trabajo personal. La Santidad es solo para valientes, que tienen fuerza de voluntad y saben perseverar sin volver atrás, es una vocación en común dada en el bautismo, si eres un bautizado estás llamado a ser Santo, alcanzar la corona de la Santidad. 

Oración 


Señor Jesús, tú nos dijiste: “sed perfectos como vuestro Padre celestial es perfecto”, invitándonos así a ser imitadores De Dios por la santidad de vida, ayúdanos a ser coherentes con nuestra condición de bautizados; a ser apóstoles comprometidos del evangelio; a ser estímulo que suscite y anime la fe de los que no la tienen, la han perdido, o la viven con superficialidad, socórrenos para ser Santos cada día y que al final gocemos las alegrías eternas. Amén. 

Santa Eulalia, virgen y mártir, ruega por nosotros. 

Terminar con la Oración Final. 

Día Séptimo 


En el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo. Amén. 

Fidelidad 


“Mantengámonos firmes, sin dudar, en la esperanza de la fe que profesamos, porque Dios cumplirá la promesa que nos ha hecho”. (Hebreos 10, 23) 

Cuando Publio Daciano al entrar en Barcelona hizo con todo su séquito, públicos y solemnes sacrificios a los dioses paganos, dio orden de buscar cautelosamente a todos los cristianos para obligarles a ofrecer incienso a los dioses, aconteció que Eulalia se escapa de sus padres y se presenta ante el cruel juez y se niega a ofrecer incienso, ya que ella adora al verdadero Dios creador de cielo y tierra, solo profundizando en la íntima conexión que existe entre fe, verdad, amor, libertad, se comprende el valor de la fidelidad a sus valores y principios Cristianos. 

Oración 


Señor, te pedimos valor y lucidez para afrontar todas las dificultades que a lo largo de la vida tenemos y tendremos, Tú eres mi fortaleza y mi roca fuerte, mi escudo protector ante la adversidad, ayúdanos a ser fieles en todo momento y circunstancia de la vida, fieles especialmente a nuestra madre la iglesia, y a nuestros compromisos bautismales, a nuestra familia, a ejemplo de Santa Eulalia. Amén. 

Santa Eulalia, virgen y mártir, ruega por nosotros. 

Terminar con la Oración Final. 

Día Octavo 


En el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo. Amén. 

Fortaleza 


“Dios es para nosotros refugio y fortaleza, un socorro en la angustia”. (Salmos 46, 1) 

Santa Eulalia una vez que ha elegido guardar la fe y dar testimonio de ella como verdad, necesita de una virtud que haga óptima su voluntad, a fin de perseverar firme en su decisión hasta la muerte, es la virtud cardinal de la fortaleza, que hace soportar los tormentos del martirio. La fortaleza la capacitó para vencer el miedo, incluso a la propia muerte, así como para afrontar las pruebas y las persecuciones. 

Oración 


Señor, ya que por don tuyo la fuerza se realiza en la debilidad, concede a todos tus fieles obtengamos la fortaleza de vencer nuestras dificultades, como Santa Eulalia venció los tormentos del cruel martirio. Ayúdanos a salir de nuestra condición de pecado, de nuestra falta de compromiso, de entrega en el apostolado; reaviva en nosotros el donde Fortaleza infundido en el Bautismo. Amén. 

Santa Eulalia, virgen y mártir, ruega por nosotros. 

Terminar con la Oración Final. 

Día Noveno 


En el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo. Amén. 

Martirio 


“Entonces los entregarán a la tortura y les matarán, y serán odiados en todas las naciones por causa de mi nombre”. (Mateo 24, 9) 

El mártir da testimonio de Cristo, de su vida, de sus acciones y del valor del seguimiento de sus enseñanzas, pues ha preferido la muerte a renunciar a ellas. Santa Eulalia sella su testimonio con su sangre, tal como lo hizo Cristo. En este sentido, el mártir está unido con Cristo en el Amor. Luego de las múltiples torturas, ejecutadas por sus verdugos, una por cada año de vida, la niña Eulalia entrega al Señor su espíritu, que voló al cielo, saliendo de su boca en forma de blanca paloma el 12 de febrero del año 303 siendo testigo de Cristo y de su palabra “el que pierda su vida por causa de mí y del evangelio, la salvará”. Este martirio aconteció en tiempos del emperador Diocleciano; siendo el papa de la Iglesia, San Marcelino. 

Oración 


Padre misericordioso y lleno de amor, mira a tus hijos e hijas que, a causa de la fe, en tu Santo Nombre sufren persecución y discriminación en muchos lugares del mundo. Que tu Santo Espíritu les colme con su fuerza en los momentos más difíciles de perseverar en la fe. Que les llene de esperanza para que puedan vivir su fe con alegría y libertad. A nosotros ayúdanos a seguir perseverantes y que podamos contemplar eternamente tu rostro radiante en el cielo, junto con todos Los Santos y Mártires que abrazan la palma del martirio. 

Santa Eulalia, virgen y mártir, ruega por nosotros. 

Terminar con la Oración Final.